Verónica Inés Gauna en la banca participativa solicitó ante los concejales la necesidad de contar con un edificio propio dado que sino, el establecimiento podría cerrar definitivamente.
Antes de dar comienzo a la sesión ordinaria del pasado lunes, en el Honorable Concejo Deliberante se hizo presente Verónica Inés Gauna, auxiliar docente de ATE y mamá de un alumno de la secundaria número 13 y presidenta de la cooperadora.
“Lo que vengo a proponer es mi preocupación porque la secundaria 13 no tiene edificio propio” comenzó diciendo Verónica, para luego hacer un repaso por la historia de la institución en nuestras ciudad.
En la actualidad, el edificio de la Secundaria 13 se encuentra ubicado en calle 6 entre 31 y 35 el cual se clausuró en el 2017 dado que tras unos arreglos en cielorraso, notaron que el techo estaba por colapsar.
“En ese momento no se pudo ingresar nunca más al edificio y fue trasladado” relató Verónica, haciendo un derrotero por los diversos establecimientos por donde estuvieron deambulando en estos últimos años, lo cual los llevó a perder matrícula.
“Mi preocupación es que se prevé que el año que viene se van a cerrar dos cursos más y para el otro año un turno, va a quedar solamente el turno mañana. Entonces mi preocupación y mi pedido es por la escuela secundaria 13 para que ella puede tener su edificio propio” agregó.
Por último, Verónica defendió el valor de la escuela pública remarcado que “es el beneficio para un montón de alumnos”.
A continuación, hizo uso de la banca participativa Luis Hernán Romero, alumno del centro de Formación Laboral Nº 402 en el curso de apoyo en seguridad e higiene industrial. En ese sentido el joven presentó un proyecto para colocar bandas refractarias en los contenedores verdes con el objetivo de que se puedan visibilizar en la noche y así evitar accidentes y preservar el mobiliario.