A través de una comunicación enviada a los medios locales, referentes del Partido Obrero Mercedes expresan su opinión sobre la problemática de agua potable en la ciudad de Mercedes.
“La falta de agua potable es un crimen. El gobierno de Ustarroz y Kicillof son los responsables”, dice el título de la comunicación enviada por el Partido Obrero. “La problemática del agua en la ciudad no es nueva, es un problema que se genera en la temporada veraniega todos los años. Pero este año ha generado una verdadera crisis no solo por la pandemia que la agrava sino porque a diferencia de años anteriores ha abarcado a una mayor cantidad de población de la ciudad y está teniendo una extensión de tiempo mayor. Hay vecinos que acusan ya cincuenta días sin agua potable!”, expresan.
“Esta crisis no sólo afecta a la ciudad, es generalizada en toda la provincia de Buenos Aires, La falta de agua se debe la falta de obras de mantenimiento y extensión de la red hídrica, que es deficitaria para abastecer a los barrios bonaerenses. El propio gobierno reconoce el déficit de obras al decir que serian necesarios 139 pozos nuevos en la provincia. (Infocielo, 28/01/21)”, agrega.
“Frente a esta crisis, Kicillof anuncia la adjudicación de obra de 53 pozos, para una zona de la provincia que abarcaría 18 municipios (Mercedes no está incluida) El gobierno bonaerense viene muy por detrás del reclamo y de las necesidades de inversión para resolver una emergencia que anuncia ser más grave. Esta situación, se da además en la marco del intento de retorno a las clases presenciales ¿Cómo piensan garantizar los gobiernos la sanitización cuando ni siquiera se cuenta con un elemento fundamental para la limpieza como es el agua?”, resalta
“El uso irracional del agua para emprendimientos capitalistas, en un momento de sequía, debe ser encarado con un plan de racionalización donde se garantice el abastecimiento en función de las necesidades sociales” expresa el PO.
“Esto, más lo que señalábamos sobre la ausencia de obras, es el foco del problema y no como señaló el intendente interino Matías Dematei que responsabilizó a los vecinos por llenar pelopinchos. La orientación del gobierno municipal es cargar las culpas sobre el trabajador que busca superar las altas temperaturas con una pileta de lona, pero nada dicen de las empresas que derrochan millones de litros de agua sin ningún control, y ni hablar de las pérdidas producidas por roturas de caños como el del bario Seminario”, ejemplifican.
